El 90% de la información que recibimos al conducir nos llega al cerebro a través de la vista. La realidad aumentada y los gráficos en tres dimensiones aumentarán la seguridad al volante, según Carglass.
La forma en la que el conductor y los pasajeros de un coche reciben información visual van en paralelo al desarrollo de nuevos sistemas ADAS de asistencia a la conducción y a la conducción autónoma, y el parabrisas no se queda atrás. Ofrece protección y transparencia, es el soporte de cámaras y sensores, y apoyo para que se despliegue el airbag del pasajero. Ahora, el parabrisas se convertirá en una compleja pantalla para aumentar la seguridad.
Parabrisas con pantallas 3D
Los sistemas de visualización en tres dimensiones permiten estructurar mejor la información. Facilitan la comprensión de los elementos espaciales, del head-up display del parabrisas, o del cuadro de mandos. Así, según el estudio “Stereoscopic 3D user interfaces exploring the potentials and risks of 3D displays in cars” de Nora Broy, Stuttgart, la tecnología 3D acelera la reacción del conductor y mejora los juicios de profundidad mientras conduce. El 3D permite una fácil traducción entre el mundo real y el virtual. Las señales de navegación y la distancia con vehículo anterior, por ejemplo, se transmiten de forma intuitiva.
De cara a la progresiva integración de la conducción automatizada, la visualización en tres dimensiones ayuda al conductor a reincorporarse a la tarea de conducir, en un coche autónomo de nivel 3. Si el vehículo admite varios modos de automatización, la interfaz de usuario debe transmitir una comunicación clara y completa del modo de automatización actual: necesita una representación explícita de sus responsabilidades actuales y de las del vehículo. Y en un coche completamente autónomo, las pantallas 3D ofrecen nuevas oportunidades para proporcionar experiencias de inmersión con juegos y películas; así como para la interacción con otras personas dentro y fuera del coche.
Varios fabricantes de automóviles están desarrollando una tecnología de visualización para transmitir información de seguridad en tres dimensiones, en tiempo real y delante del conductor; y permitir a los pasajeros ver películas en 3D directamente desde sus asientos.
Integración de la realidad aumentada
Fabricantes de automóviles, de pantallas y compañías tecnológicas trabajan en paralelo para cambiar la forma en la que el conductor y los pasajeros de un coche reciben información visual. La realidad aumentada permite desplegar ante los ojos del conductor todo un mundo de señales, alertas e indicaciones de forma natural. En las patentes presentadas por Apple incluso se especifica la posibilidad de realizar llamadas a través de FaceTime entre dos coches autónomos.
Los desarrollos de la visión 3D y la realidad aumentada van en paralelo, pero son dos tecnologías que están destinadas a converger y que veremos en coches de venta al público en menos de cinco años.