A mitad de camino. Ahí se encuentran los talleres en el proceso de recuperación del negocio perdido por la pandemia. En total, cerrarán este año con una facturación de 12.726 millones, con un incremento del 14,7%, pero aún deben alcanzar la cota de los 14.000 millones para volver al escenario justo anterior a la COVID-19, según el informe “Cartografiando la posventa” de Solera -que mueve más de cuatro millones de reparaciones anuales-, presentado con motivo del Congreso de Faconauto, que se celebra hoy en Madrid.
Evolución de la facturación de la posventa de 2019 a 2021
Así, en 2021 recuperarán 1.629 millones de euros y faltarán otros 1.400 millones hasta llegar a niveles precovid, lo que tendrá lugar a finales de 2022. De este modo, la posventa se alinea con la economía española, dado que tanto el crecimiento del PIB como la evolución del desempleo muestran que a fin de 2021 ambos estarán a medio camino de la recuperación.
Esta mejora del escenario económico y sanitario generará más volumen de trabajo a los talleres, de modo que las reparaciones, tras caer el año pasado un 18%, crecerán en 2021 un 11,4%. Esta cifra, no obstante, es un 8,7% inferior a la de 2019, constatando así que el sector de momento sólo ha podido conseguir la mitad de lo perdido.
Y cuando llegue la recuperación, será distinta para los talleres a la salida de la crisis anterior, debido especialmente al envejecimiento del parque, más acusado. Si en 2015 los coches de más 10 años representaban el 53% del total en circulación, ahora son el 62%. Sin embargo, a pesar de ser una gran mayoría y disparar por encima de los 13 años la antigüedad, a más “canas”, menos taller, pues apenas representan el 25% de las reparaciones.
Cuando la recuperación pasa por recuperar la movilidad
Otra de las claves de la recuperación será la movilidad, en tanto los españoles hicieron en torno a un 20% menos de kilómetros el año pasado. Y por cada kilómetro que dejaron de recorrer, se estima una pérdida de facturación de 114 euros por vehículo y año.
En este sentido, el fin de las restricciones de movilidad permitirá que los vehículos puedan recuperar su ritmo habitual de circulación, dado que la posventa depende esencialmente del movimiento. Por eso, en 2020, el canal menos afectado en volumen de reparaciones fue el renting, con un descenso del 6,8%, cuando concesionarios y talleres independientes cayeron tres veces más.
Esto es debido a que en el renting estas operaciones entran dentro de la cuota y son vehículos sometidos a un escrutinio mecánico muy exhaustivo. Y, por eso, este canal estará más cerca que ningún otro de alcanzar la plena recuperación en 2021, solo un 1,5% por debajo de donde estaba en 2019.
Según José Luis Gata, responsable de Mercado Posventa de Solera, “el año 2020 experimentó la peor caída del PIB en España desde la Guerra Civil; si bien, se espera una recuperación más rápida, que debería llegar en 2022. No obstante, otro cantar puede ser la economía doméstica. En la crisis anterior, una disminución de renta del 13% produjo un 50% menos de matriculaciones. Y la posventa vive del vehículo nuevo. Es el que más se mueve, más se repara, más y mejores coberturas tiene, etc. Una cosa será volver a niveles precovid y otra volver a encontrar la buena senda de crecimiento. Y aquí lo tendrá más difícil la clase media del taller, pues el grande tiene músculo y el pequeño puede vivir de momento de coches más viejos”.