Se ha publicado en España el Real Decreto Ley 5/2021 de 12 de marzo, para repartir una cantidad de 7.000 millones debido a la pérdida de ingresos causada por la epidemia de la COVID-19.
Sin embargo, estas ayudas no están destinadas a la familia «Mantenimiento y reparación de vehículos de motor». Los talleres de reparación de vehículos y los distribuidores de recambios, entre otros sectores, no van a percibir ayudas del Gobierno para paliar la falta de ingresos, aunque sí las percibirán otros autónomos afectados.
“Con el fin de proteger el tejido productivo y evitar un impacto estructural sobre la economía, en línea con el resto de países europeos, el Estado ha desplegado diferentes paquetes de medidas para apoyar a empresas y autónomos. En primer lugar, proporcionándoles liquidez mediante créditos con aval público y moratorias en sus principales deudas fiscales, de devolución de créditos y de pago de cotizaciones. En segundo lugar, con acciones para reducir sus costes fijos y variables, mediante ayudas directas para el pago de los salarios y las cotizaciones sociales de sus trabajadores, así como diversas medidas de alivio en el pago de alquileres. En tercer lugar, proporcionándoles ingresos mediante una prestación extraordinaria para los trabajadores autónomos y a través de las transferencias de recursos a las Comunidades Autónomas y las Ciudades de Ceuta y Melilla para que pudiesen atender los gastos extraordinarios en el ámbito sanitario y educativo y proporcionar ayudas directas a las empresas más afectadas por las decisiones sanitarias tomadas en su ámbito territorial”.
La dotación total es de 7.000 millones de euros y se repartiría en un primer compartimento, con 5.000 millones de euros, para todas las Comunidades Autónomas, (salvo Baleares y Canarias), Ceuta y Melilla incluidas; y un segundo compartimento, con una dotación de 2.000 millones de euros, para las Comunidades Autónomas de Baleares y Canarias.
Fuera de estas ayudas –además de peluquerías, autoescuelas o formación no reglada- figuran los comercios de repuesto del automóvil y talleres de reparación. Sin embargo, ante la frustración entre los sectores en principio excluidos de las ayudas directas la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, está dispuesta a que se hagan “ajustes” al listado de beneficiarios. Es decir, se podrían ampliar los 95 epígrafes del CNAE (Clasificación Nacional de Actividades Económicas) que en principio estaban destinados durante las próximas semanas.
La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) ha venido denunciando que había muchos autónomos afectados por la emergencia sanitaria que no estaban incluidos dentro de esa batería de epígrafes de CNAE. El presidente de ATA, Lorenzo Amor, aseguró que las ayudas directas aprobadas por el Ejecutivo “llegan tarde, son insuficientes y lo más grave es que dejan fuera a muchos autónomos que ahora mismo están sufriendo las consecuencias de la pandemia”.
La titular de uno de los ministerios, junto al de Hacienda, de gestionar las ayudas directo dijo que la voluntad del Gobierno «es gestionar bien el dinero público y que llegue de verdad a las empresas que lo necesitan. Si hay que hacer algún ajuste, se hará» aseguró la ministra. Se hace una revisión constante de las ayudas y si es necesario se adaptarán” aseguran desde el ministerio. También señalaron que se han basado en los sectores beneficiarios de los ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) para escoger a los negocios que tendrán acceso a las ayudas.
Tampoco en marzo de 2020 los talleres se encontraron entre las actividades con posibilidad de acogerse a una moratoria sin intereses en el pago de las cotizaciones sociales, pese a la insistencia de las patronales CETRAA y CONEPA.