Nada más ver el coche… ¡deja claras sus intenciones! Nos encontramos un turismo familiar con ganas de aventura. Y es que su altura libre es de 21,3 cm, la amplia distancia entre rueda y pase de rueda y las grandes protecciones en plástico negro en los bajos de los paragolpes manifiestan que este coche está hecho para algo más que carreteras y autovías convencionales.
Al abrir la puerta, nos encontramos con un interior muy espacioso, unos acabados de gran calidad, unos asientos delanteros amplios con regulación eléctrica y unos traseros calefactables, además de una pantalla vertical en el centro del salpicadero, que no pasa desapercibida por sus 11,6 pulgadas -y que mantiene físicamente los botones más utilizados como: volumen, calefacción y radio-.
Técnicamente
Si pasamos a su apartado técnico, nos encontramos con un único motor en sus tres versiones: un bóxer gasolina 2.5 atmosférico que otorga una potencia de 169 CV. En mi humilde opinión -para ser la única opción disponible- se queda corto para mover un vehículo de 1.716 kg y no genera la respuesta esperada en los momentos en que se necesita mayor rendimiento del motor, como adelantamientos o incorporaciones.
Por el contrario, el comportamiento que presenta la caja de cambios es bueno; este modelo solo se comercializa en España con cambio automático Lineartronic que genera cambios suaves y efectivos, sin llegar a transmitir grandes ruidos al habitáculo, salvo cuando pisamos a fondo.
Debemos recordar que estamos hablando de Subaru y su respuesta en terrenos difíciles esta más que contrastada; con una tracción integral simétrica capaz de responder en las situaciones más difíciles. Su suspensión, McPherson en el eje delantero y de paralelogramo deformable en el trasero, me parece lo mejor del vehículo, consiguiendo que no te enteres de los baches en autovía, de los badenes en ciudad ni de las piedras en los caminos. Y en cuanto al consumo se refiere, el Subaru Outback es un coche con motor bóxer, grande, alto y pesado, por tanto, los consumos no le favorecen. La marca anuncia un consumo de 8,6 l/ 100km -nosotros aseguramos que va a ser un poco más-.Respecto a la seguridad, no han escatimado gastos en ella. Con 5 estrellas en EuroNCAP y porcentajes muy altos en todos sus apartados.
Por último, respecto al equipamiento ADAS, ofrece los habituales sistemas de ayuda a la conducción muy bien depurados. Su sistema Eyesight es capaz de reconocer nuestra cara, darnos la bienvenida mientras personaliza nuestra configuración o detectar cuando nos distraemos o nos podemos quedar dormidos al volante de una manera precisa (¡le hemos intentado engañar guiñando los ojos o frunciendo el ceño, sin conseguirlo!). Entre el conjunto de ADAS destaca el control de velocidad adaptativo, capaz de reanudar la velocidad de una forma suave y progresiva ya que acelera una vez que se da el intermitente y se evitan tirones. También, el control de mantenimiento de carril, poco invasivo y cómodo. Por poner una pega, diría que faltan sensores en la parte delantera del vehículo, y es que, para un vehículo tan grande, son necesarios para evitar las típicas columnas que se mueven en los garajes y párquines.
En conclusión, el Subaru Outback es el vehículo perfecto para llevar a tu familia al campo o la montaña. Hecho para ser cómodo y confortable en cualquier situación, no parece muy recomendable para un uso diario en ciudad por su elevado consumo.