Organizado el pasado 24 de octubre de la mano de ICEA y GT Motive, este evento especializado dio cita a relevantes representantes del mundo del seguro (tanto en siniestros, como en producto), red de talleres, centro de investigación, empresa tecnológica y otros actores clave para entender el presente y futuro del ramo de Autos, con una nutrida y relevante audiencia.
La temática de la jornada de este año se centró en el impacto de la creciente cantidad de tecnología que se incorpora en el automóvil, y en concreto la sensorización y los diferentes equipamientos de ayuda a la conducción (ADAS).
Partiendo de una aproximación general en el primer bloque de ponencias, se pasó a una visión más detallada de cómo la tecnología está impactando en las principales variables de gestión del siniestro.
Para comenzar, y cómo es habitual en esta jornada, se hizo un repaso a la evolución económica y del sector por parte de Juan Ramón García, de BBVA Research. Entre los datos a resaltar de dicha ponencia, la revisión de moderación del crecimiento económico en 2019, manteniendo cifras de matriculación en torno al 1.200.000 de vehículos, pero sin rejuvenecimiento del parque.
A continuación, Pablo Jiménez, de ICEA mostró una buena evolución del Seguro, aunque no homogénea en las compañías, basándose en cifras del sector compiladas por la propia ICEA.
Ya dentro del bloque temático de la jornada, Carlos Arregui, director de Centro Zaragoza, mostró una interesante información de cómo está evolucionando el automóvil con las nuevas tecnologías y qué retos, oportunidades y riesgos se presentan para las compañías de seguros. En este proceso, este centro de investigación tendrá una participación muy activa, no sólo en el conocimiento técnico, sino acompañando a las compañías en este viaje hacia los cambios en la movilidad, la electrificación, el coche autónomo, etc.
La siguiente intervención, a cargo de Pablo Liñares, Director de GT Motive, mostró los resultados de un estudio realizado por la compañía tecnológica, analizando los costes de reparación de 20 modelos top ventas, y comparando la versión actual con la inmediatamente anterior y a igualdad de versiones. El coste medio se incrementa en un 14.17% de media, principalmente a causa de la cantidad de nuevos sensores que se incorporan y el incremento de precio en algunos recambios, tales como los faros, debido a la nueva tecnología que incluyen (leds, etc.).
Este estudio teórico estuvo respaldado por un análisis del histórico de valoraciones de la compañía, representando el 40% de las valoraciones del mercado, donde se comentaron casos de incrementos del 10% y superiores en el coste medio de reparación en un mismo modelo en cambio de una versión a una posterior. También se señaló el crecimiento muy relevante en las valoraciones de los últimos dos años de vehículos que incorporan sensores y radares de proximidad en sus equipamientos de serie, con el mencionado doble efecto en mejora de la seguridad y menor siniestralidad, pero con un mayor coste en la reparación.
A continuación, y para finalizar la ponencia de GT Motive, se presentaron los resultados de una encuesta lanzada en colaboración con ICEA durante las semanas previas al evento a compañías del sector del seguro, del renting, fabricantes de vehículos y reparadores.
Los resultados de esta encuesta arrojaron datos interesantes, como que el 53% de las compañías encuestadas confirman un aumento en el coste de las reparaciones. Sin embargo, solo una minoría es capaz de identificar una disminución en la frecuencia, gracias a las ayudas en la conducción (el 13%).
También cabe resaltar que, por ahora, pocas compañías (20%) han incorporado estos equipamientos en sus modelos de pricing, ofreciendo cotizaciones diferenciadas en función de si el vehículo incorpora ayudas que disminuyan la siniestralidad.
En cuanto a la visión de los reparadores y las redes de reparación, la encuesta indica varias conclusiones, como que el taller va a tener que adaptarse y formarse, debido a la irrupción de estas nuevas tecnologías, aunque la aparición de nuevos actores y la certificación cobran importancia en las respuestas.
Para finalizar, se expuso la visión del asegurado. La mayoría de los encuestados (60%) coinciden en no ser conscientes de la cantidad de tecnología de su vehículo, por lo que no es un factor que influya en sus decisiones de compra del seguro.
Por último, los presentes tuvieron la oportunidad de escuchar de primera mano la opinión de Directores de Siniestros y Auto de Generali (David Casademont) y AXA (Francisco Olmedo), además de la visión de la red de talleres PPG – CertifiedFirst (Xavier Pegueroles) y de GT Motive (Jose María Castelo), como empresa tecnológica y de información, en una mesa redonda moderada por Manuel Mascaraque, de UNESPA.
En las conclusiones de la mesa, se constató el enorme recorrido que aún tiene el sector en la gestión del mayor coste en daños materiales que traen estas tecnologías (en piezas, en calibración/ajustes, mano de obra especializada, equipamiento de reparación, formación). Es relevante señalar que aún hay compañías que no están percibiendo un sensible aumento de costes, cuando la opinión en la mesa fue que hoy ya se está produciendo, sin tener la compensación de una menor frecuencia.
También quedó patente la necesidad de revisar los parámetros de selección de reparadores, incluyendo aquellos que certifiquen su adaptación a los nuevos procesos, como está ocurriendo en otros países como USA y UK.
Los fabricantes de automóviles están impulsando esta necesaria mejora tecnológica y están en la primera línea de información y acción, por lo que tendrán mucho que decir en esta adaptación del proceso, de las redes de reparación y en la nueva relación con compañías del sector.
En definitiva, una jornada de alto interés para los asistentes que volvió a tratar un tema de actualidad, y sensible para las compañías, y en la que se aportaron datos de la evolución del sector, estudios concretos sobre el impacto en coste, así como un pulso general del sector a través de la encuesta y el debate finales.